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La continua extracción del grano y forraje de las parcelas a través de los años resulta en una exportación de nutrientes del suelo lo cual a su vez resulta en deficiencias nutricionales a menos que estos nutrientes sean reemplazados con fertilizantes orgánicos o inorgánicos. Una de las prácticas para lograr incrementos en los rendimientos de maíz es que se realice una fertilización balanceada ya que la gran mayoría de los productores mexicanos a escala nacional solo fertiliza con nitrógeno y fósforo, lo cual limita su producción. Estos problemas se pueden solucionar con análisis de suelo procedente de un laboratorio que este acreditado o certificado. El área de Fertilidad Integral del Programa MasAgro Productor, realizó en el estado de Morelos en el municipio de Tepalcingo la evaluación de una nutrición balanceada, basada en la recomendación derivada del análisis de suelo y el potencial que tiene esta práctica cuando se combina con prácticas que involucran el uso del mejor híbrido, la mejor fecha y densidad de siembra adecuadas. Esta guía no busca establecer las condiciones ni variedad ideales, por el contrario, su objetivo es únicamente dar a conocer los resultados de la evaluación para que el usuario utilice esta información a su favor, con base en sus requerimientos.

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